Los sistemas de embalaje con calor, también conocidos como sistemas de termoencogido, son útiles en una variedad de situaciones en las que se desea proteger y estabilizar productos para su transporte y almacenamiento.

 A continuación le presentamos algunos casos en los que desde CMB recomendamos utilizar sistemas de embalaje con calor:

  1. Para proteger productos durante el transporte: el embalaje con calor puede proporcionar una capa adicional de protección para los productos que se están transportando, especialmente si tienen formas irregulares, son frágiles o delicados.
  2. Para mejorar la presentación de los productos: el embalaje con calor puede mejorar la apariencia de los productos al reducir la cantidad de aire y espacio vacío en el envase, lo que puede hacer que los productos se vean más atractivos.
  3. Para estabilizar productos: el embalaje con calor puede ayudar a estabilizar los productos dentro del envase, lo que puede prevenir daños y reducir la cantidad de residuos.
  4. Para aumentar la durabilidad: el embalaje con calor puede ayudar a aumentar la durabilidad de los productos, protegiéndolos de los elementos y previniendo la oxidación.
  5. Para reducir el tamaño del paquete: el embalaje con calor puede reducir el tamaño del paquete, lo que puede reducir los costos de envío y almacenamiento.
  6. Para cumplir con regulaciones de seguridad e higiene: algunos productos requieren de un embalaje especial para cumplir con las regulaciones de seguridad e higiene, y los sistemas de embalaje con calor pueden ser una opción efectiva para lograrlo.