Nuestra maquinaria de embalaje puede utilizar distintos tipos de materiales, según los requerimientos de cada sector industrial. El film estirable de polietileno y el film de burbuja son los más utilizados, aunque también pueden utilizarse láminas de cartón ondulado. Se trata de materiales reciclables, que son claves para convertir el proceso de producción en uno más sostenible.

El film estirable es una de las soluciones más eficientes para las industrias a la hora de embalar. Algunas de sus grandes ventajas son:

  • Permite agilizar los procesos: el film estirable posibilita el embalaje en sistema horizontal y en continuo de palets apilados con un alto grado de sujeción, sin sufrir ningún contratiempo y de una forma rápida y sencilla.
  • Es muy económica: al no requerir calor para su ajuste, este tipo de embalaje produce un gran ahorro de energía.
  • Gran versatilidad: el embalaje con film estirable permite embalar un amplio abanico de productos, tales como muebles de grandes y pequeñas dimensiones, puertas, ventanas, planchas apiladas, textil y polietileno, y muchas más.

El film termorretráctil es aquel que utilizan las máquinas con calor. Se trata de un film de polietileno transparente que, al recibir calor, retractila y ofrece un ajuste óptimo y de larga duración. Además, permite visualizar el producto en su interior, por lo cual resulta ideal para el cliente final.

El film de burbuja y las láminas de cartón ondulado suelen utilizarse como complemento del film transparente, para aumentar el grado de protección. Se suelen utilizar en los productos que tienen cierta fragilidad, o aquellos que serán transportados en determinadas condiciones que hagan necesaria una mayor protección.